Si bien la mayoría de los conductores son conscientes de que es muy peligroso e ilegal operar su vehículo bajo la abogado juicio rápido o las drogas, los agentes de la ley aún informan sobre un número significativo de personas detenidas y acusadas de DWI de forma regular. Desafortunadamente para las personas que enfrentan tales cargos, una condena por DWI puede tener un impacto grave en su vida personal y profesional, y el proceso legal ocasionalmente puede ser largo y complicado.
Si un oficial de la ley sospecha que un conductor está ebrio detrás del volante, él o ella pueden detener a la persona bajo sospecha de DWI. Para determinar si un conductor está ebrio o no, el oficial puede solicitar que la persona se someta a una prueba de sobriedad en la carretera, que puede incluir ejercicios físicos o mentales diseñados para mostrar la destreza y el estado mental de la persona.
Además de las pruebas de sobriedad en la carretera, el oficial puede pedirle a la persona que también se someta a pruebas químicas, que pueden incluir análisis de sangre o pruebas de alcoholemia para verificar el contenido de alcohol en sangre de la persona. Si bien los exámenes físicos se graban en video para usarlos en la corte, las pruebas químicas a menudo son mucho más convincentes para un juez o jurado, por lo que es importante comprender cómo se administran y usan durante un juicio por DWI.
La prueba del alcoholímetro examina la cantidad de contenido de alcohol en el aliento que exhala el sospechoso. Las máquinas a menudo varían en instrumentación y método, pero en última instancia, están diseñadas para analizar la respiración de una persona y determinar si la persona tiene un BAC de 08 o más. Si el aliento de la persona revela un contenido de alcohol de 08, él o ella pueden ser arrestados y acusados de DWI.
Si bien la prueba del alcoholímetro a menudo es convincente en la corte, existen ciertos problemas que pueden surgir con la prueba y un abogado con experiencia puede cuestionarlos. Si la máquina del alcoholímetro se dañó de alguna manera o se calibró incorrectamente para la prueba, los resultados de la prueba pueden ser inexactos. Además, si el oficial no administró la prueba correctamente o no guardó los resultados en el formato correcto, es posible que no sean admisibles en la corte.
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