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Las tuercas de acoplamiento de acero de aleación B6 se producen con una aleación de acero que incluye mayormente cromo y molibdeno, lo que les otorga una resistencia excepcional contra la corrosión, la tracción y las elevadas temperaturas. Estas tuercas suelen emplearse para vincular dos barras largas y roscadas, generando una conexión sólida y prolongada que facilita la transmisión de fuerza o la conservación de la alineación estructural.

Los sujetadores hechos de cobre níquel 90/10 (90% cobre y 10% níquel) son muy apreciados en usos marinos por su magnífica resistencia a la corrosión causada por el agua salada. Este material constituye una barrera de protección natural que lo resguarda contra el biofouling, lo que implica que es menos susceptible a la acumulación de seres marinos como algas y mejillones.

Los sujetadores Monel 400 son componentes de sujeción producidos con una aleación de cobre y níquel, reconocida por su magnífica resistencia a la corrosión, particularmente en entornos marinos y químicos. Esta aleación, que se compone alrededor del 67% de níquel y un 30% de cobre, brinda una alta resistencia mecánica, excelente soldabilidad y una notable longevidad incluso en circunstancias severas.

Los sujetadores de acero inoxidable 316 se destacan por su magnífico desempeño en ambientes marinos rigurosos. Una de sus principales ventajas es su elevada capacidad de resistencia a la corrosión, particularmente frente al agua salada y los cloruros, lo que los hace una elección perfecta para embarcaciones, muelles y plataformas de navegación offshore. Su presencia de molibdeno proporciona un nivel extra de defensa contra la oxidación, extendiendo de esta manera la durabilidad de las estructuras.

Los sujetadores de acero inoxidable 304L se emplean extensamente en proyectos industriales y comerciales por su magnífica resistencia a la corrosión, longevidad y adaptabilidad. Estos sujetadores son perfectos para usos en entornos húmedos o corrosivos, tales como la industria de alimentos, química, farmacéutica y marina. Su capacidad para resistir el ácido, el cloro y otros compuestos químicos perjudiciales los hace la elección predilecta para equipos de procesamiento, depósitos de almacenaje, sistemas de tuberías y elementos estructurales.